Cambio de Eje Trasero y Cardán
	Como achiqué el motor de 4300c.c. a 2500c.c. tenía velocidad pero me faltaba potencia, solución: cambiar el eje trasero por el de una camioneta más antigua de igual trocha pero con menos motor. finalmente, después de mucho buscar en un cementerio de autos encontré un viejo eje trasero de Chevrolet Carry All lleno de oxido: mucha escobilla de fierro, un tarro de antioxidante y una capa de pintura hicieron el pequeño milagro. Igual la adaptación resultó una pequeña pesadilla
	Nunca había visto un diferencial desarmado y ni me imaginaba para que servía, tengo que reconocer que el sistema es una maravilla, mi homenaje para el genio que lo inventó. La nueva corona era más chica y da 3.5 vueltas por cada vuelta de rueda, la antigua daba un poco más de 2 vueltas, ahora tendremenos velocidad final pero más fuerza,que es lo que necesito para tirar la casa rodante en las largas cuestas del norte.
	Y ahi tenemos la camioneta con el eje trasero afuera, esperando la adaptación. Esta sería una mas de la larga lista de errores del imbecil-mecánico que me hizo el trabajo.
	Con el eje trasero nuevo salí a probar como tiraba la casa, en general quedótodo desplazado un cambio hacia arriba: lo que antes hacía en segunda ahora lo hace en tercera y así sucesivamente, gané bastante en potencia y no veo una pérdida notable en la velocidad final. En fin, mi primera tirada de la casa rodante fue para llevarla a lavar y sacarle más de un año de sal acumulada al borde de la playa
	Bueno, la casa causó sensación entre los empleados del lavado, la inspeccionaron minuciosamente y la lavaron con mucho entusiasmo, todo por solo U.S.$ 7 aproximadamente, incluída la camioneta. Incluso siendo tan avaro como soy accedí a darles unas bien ganadas monedas de propina.
	Ya está lista la casa y ahora le toca a la camioneta, un prolijo lavado de carrocería para dejarla like new. Nunca había visto la casa tan limpia, ni siquiera cuando la compré
	Y para probar la camioneta el sábado nos fuimos con la Pilar a Tacna, en pleno desierto peruano y pasados los 100 Km/h el cardán comenzó a vibrar tan fuerte que soltó todos los pernos de la palanca de cambio. Bah, pensé, si va a pasar algo que pase ahora. Apreté los pernos y seguí corriendo a ver que pasaba. Mala idea, el cardán se partió como si fuese de cartón dejándome botado en plena pampa.Un "buen samaritano" me cobró US$ 26.-por tirarme hasta Tacna "que estafa" pensé y en venganza me fuí con el freno de mano puesto. Seguro que el disco de embrague le salió más caro por sinverguenza.
	Me dejó en un taller mecánico de aspecto bien dudoso, pero el dueño me dijo que el asunto no iba a salir muy barato pero era fácil, se comprometió a dejarlo perfecto. "Vuelve el lunes y lo arreglamos al toque" me dijo. Encomendándome a San Martín de Porres le dejé la camioneta en sus manos
	Y allí está el gordito que resultó ser una caja de sorpresas. Mecánico muy competente, ex chofer de camión que hablaba inglés con una soltura envidiable "es que pasé varios años en Europa comprando vehículos" me explicó, me dejó estupefacto. Hablando en plata me cobró US$ 35.- por toda la mano de obra, sin incluir repuestos ni tornero. Buscamos cardán pieza a pieza, hasta armar uno excelente de fierro en dos secciones "con descanso". Costo del cardán armado, aproximadamente US$ 60.-
	Después fuimos al tornero para el trabajo de cortar, añadir, soldar y balancear, todo esto demoró un día completo y costó US$ 30.- aproximadamente. Lo probamos y resulto desbalanceado, otro día más y otro viaje, vuelta al tornero. Después de una tarde completa de repetir todo el trabajo finalmente lo tuve bien balanceado como corresponde.
	Aquí el gordo examina su obra de arte,por el mismo precio me arregló el soporte del alternador (soldándole una pieza adicional), apretó la culata (que el otro mecánico había dejado suelta), reguló las válvulas (mal reguladas por elotro, para variar), cerro varias fugas de aceite que habían quedado, cambió las correas que no correspondían y sacó varios otros detalles menores. Quedé muy conforme con el trabajo y creo que será mi nuevo mecánico de cabecera para la camioneta.
	Y allí está la joyita de vuelta en casa, la llevé a regular los frenos y resultó que el imbécil-mecánico habia dejado todas las tuercas de los platos sueltas (dos ya se habían caido) las ruedas traseras estaban bailando y por milagro no se me salieron en la carretera. Dios me ama.