Las Malas Juntas

Creo que este sitio no está completo mientras no haga una enumeración de mis amigos. Tal vez el tema no resulte de interés para nadie pero para mi si es muy importante, mis amigos han sido parte de mi, como las uñas o el pelo y es importante que les dedique un pequeño espacio. Ahora que lo pienso igual que el pelo, a medida que pasa el tiempo cada vez me van quedando menos . No incluiré a ninguna de mis numerosas amigas porque no valen la pena (jaja, solo para enfurecerlas, lo que pasa es que las mujeres son demasiado celosas), ni tampoco a mis amigos de después que salí de la universidad, a esos los pondré más adelante.

Si vamos lo suficientemente lejos puedo recordar a Luchito Muñoz como mi primer amigo, tenía 6 años igual que yo cuando entré en la escuela. Durante años tuve una foto de ese curso donde salía Lucho con suspensores, muy flaco y con su afilada cara de viejo.

En mi niñez viví en uno de los peores lugares; la población Santiago era entonces la más peligrosa de Chile, mis vecinos Jimmy Quinteros, Orlando, Manuel y su hermana Ema  (con quien me inicie en los juegos del doctor y el papá con la mamá) eran mis amigos de entonces.También me honraba con su amistad "El Bistec" un cogotero (asaltante) de verdad que gentilmente hacía un alto en su trabajo y escoltaba a mi mamá cuando llegaba en la noche desde el trabajo porque, según decía "por aquí anda gente muy mala, señora".

Dos primos llegaron a vivir a mi casa por esos años; Camilo y Mario fueron amigos, ídolos y compañeros de muchas aventuras disparatadas. Creo que nunca en mi vida volví a ser tan feliz como entonces, cuando teníamos de todo, menos $$.

Luego llegué a Arica, en 1969 cuando empezaron los problemas. Allí tuve mis primeros amigos inseparables: Milton Aranibar y Lincoln Averill compañeros del Primer Año "F" (los peores del liceo). Durante un año compartimos sueños y ambiciones, llegué a confiar en ellos como en nadie y fueron mi apoyo cuando empezaron los primeros años duros. Saludos Milton. Si es que desde Canadá lees esto, seguramente recordarás las tardes calurosas cuando Arica era mucho mas lenta y nosotros gastábamos el día recorriendo las calles y pateando piedras.

En 1970 me desterraron para Chiloé, donde pasé el período más violento y uno de los más problemáticos de mi vida. En la pensión de don Julio Norambuena, mi mejor amigo de esos años fue Juan Aguilar "Mechuque". Con el hijo de don Julio, Jorge Norambuena tuve el gusto de juntarme hace solo un año atrás. La vida en Chiloé estuvo llena de emociones fuertes y una de las dos o tres veces que se me han salido las lagrimas fue el día en que tuve que dejar la isla.

De nuevo en Arica, entré a Inacap en 1974 y hasta 1976, tuvimos el grupo humano más extraordinario que pueda recordar: el Perro Rivas (hola perrito, allá en Brasil), el Gato Oliveros, el Mono Quispe, el Pantera Rosa Vasquez, el Pepe Rojas, el Sergio Gomez (hoy señor abogado Gomez) y su compadre el Leon Ortiz, el Chango Vargas y el Vicho Barrios (a veces lo encuentro, gordo como una bola, es cocinero), Pato Salinas (hoy excelente artista), el loco Barría y el chico Barrientos, Lucho Mazuelos, Ramiro y la flaca Acosta. La memoria es fragil y sé que algunos se me quedan, pero todos ellos fueron mis amigos de los mejores que he tenido. Fuimos un grupo tan unido que hasta el día de hoy los recuerdo a todos como si fueran uno solo.

En la universidad 1978-1984

Recuerdo bien mi felicidad el primer día que entré a matricularme a la Universidad de Tarapacá. Estaba corriendo un tremendo riesgo porque me embarqué sin un peso en una carrera de cuatro o más años, pero por una vez en mi vida me contagié del optimismo de mi mamá y me metí a ojos cerrados. A pesar de mi naturaleza antisocial desde el primer día nos fuimos juntando en un grupo de apoyo mutuo. Cada vez que alguno del grupo perdía la carrera era como una muerte en la familia y ellos son grandes amigos que tengo hasta el día de hoy.

Dietram Eitner, hijo de alemán, fue el primero con quien me amisté. Se enfurecía cada vez que un profesor llegaba atrasado a hacer clases, fue un excelente amigo y nos sentábamos juntos en los primeros asientos. Durante toda la carrera hicimos competencia sobre quien terminaba las pruebas más rápido y hasta donde se, fuimos los únicos que jamás copiamos en una prueba. Tuve el honor de inducirle la primera (y tal vez la única) borrachera de su vida. Después que se tituló se fue a seguir sus estudios en Alemania. Hoy vive allá y seguramente Herr Doktor está como pez en el agua entre sus coterraneos.

Pepe Drago era el líder natural de la carrera, sumamente sociable y cruel con los que designaba material de burla, era el único que llegaba en moto y bien vestido a clases (luego el papá le compró un espectacular Chevy Nova),  y para mi fue una sorpresa que me invitara a estudiar con su grupo, mientras yo era muy pobre ellos formaban una especie de jet set local así es que me llovían las bromas por lo muerto de hambre. A la inmunda pieza donde yo vivía le pusieron el "Rockefeller Center" y como me daba vergüenza que la vieran nunca invité a entrar a nadie excepto al Pepe con quien tenia bastante confianza. Nunca sentí mala intención o discriminación en las bromas, solo por el grado de confianza y amistad que teníamos podíamos hacernos las peores bromas sin enojarnos. Pese a su sociabilidad y su cuota de snobbie, el Pepe no era el típico Mr.-simpatía-sin-cerebro, la verdad es que tenia otra faceta muy inteligente, aficionado a la lectura y una capacidad de comprensión muy profunda de las personas y las cosas. Perdió la carrera cuando le faltaba solo un semestre para terminar. En la foto yo, Pepe y su hermano Alejandro.

Voy a reescribir la parte del Matute, no porque fueran mentiras sino porque conté solo una parte de nuestra amistad -tal como me increpó personalmente- y creo que es justo que la cuente completa. Esto lo voy a copiar de mi weblog porque lo escribí fresquito al día siguiente de que estuvimos tomando juntos después de muchos años.

Mario Ernesto Ramón, Matute para los amigos fue el primero y el mejor de mis amigos durante la universidad. Podría escribir un grueso libro con todas las rarezas, aventuras, chascarros, situaciones ridículas y divertidas que pasé con este tipo, los innumerables planes que hicimos y las innumerables estupideces que conversamos, las situaciones increíbles en que me vi metido por culpa de su comportamiento obsesivo con las mujeres, en fin, todos los que lo conocen me van a entender, se trata de un tipo extraordinario pero la mayoría de las anécdotas -todas las buenas en realidad- son absolutamente impublicables, mucho menos a estas alturas del partido. Por lo demás es el culpable de la desgracia de mi vida , porque una vez me dijo que tenía una movida para que salieramos con dos minas y una de esas era la Pilar, ese fue el día en que me desgracié y perdí una buena parte mis adoradas libertades, todo por culpa de adivinen quien.

Con los años resultó que el Matute estaba más cuerdo que varios de nosotros. También fue mi mejor amigo durante toda la carrera y creo que aprendí muchas cosas de su carácter y su muy desarrollado sentido común. Ahora es un serio ejecutivo de la empresa salmonera familiar en Muerto Montt, factura 3 millones de dólares al año, lo llaman los ministros pertenece al jet set puertomontino y etc. etc.... ¡No te enojis Matute, son bromas nomás!!!!!

Macana, fue uno de los últimos en juntarme. A pesar de que estudiamos 5 años juntos no fuimos amigos hasta que terminamos la carrera y, por esas cosas de la vida coincidimos en Iquique. El más sentimental, un paño de lagrimas que cumple con todos los requisitos del amigo ideal: noble, leal y lo más importante, con una capacidad prodigiosa para tomar. Nunca nadie le hizo el peso en nuestro grupo, fue el Rey indiscutido del copete, bueno, seguido de cerca por el Rucha. Manolo es otra de las personas con quien me gusta estar: pueden pasar muchos años y siempre que volvemos a vernos es como si nos hubiésemos separado ayer. Es uno de los que me gustaría tener en Arica.

No fue sino hasta el segundo años que noté la existencia del Pato Bilingüe, iba a clases vestido con chaqueta azul marino y pantalones grises, era bajito empaquetado y con cara de bruja. Un tipo sumamente formal que venía de La Serena y no se metía con nadie. De a poco lo fuimos conociendo, era tanto o más loco que el Matute, había tocado en una orquesta tropical y fue vicecampeón escolar de ciclismo, cuando se emborrachaba se ponía a hablar de sus proezas ciclísticas con tanto detalle que un par de veces estuvo a punto de irse a las manos porque no le ponían suficiente atención. Pasado el tiempo fue sacando toda una colección de excentricidades que lo hacian un tipo muy divertido como amigo, entre ella la afición a las motos enormes y a correr en moto borracho a toda velocidad, lo que le costó un accidente que casi lo mata. Su avaricia era increíble, solo el Matute le hacía competencia en ese aspecto. En la foto aparece media cara del Pato Lucas, Pepe Drago, yo y el Pato Bilingüe en mi despedida antes de viajar a Japón (1983)

El Chico Alfredo, unos 45 kilos en 1.50 mt de estatura, farsantillo como buen chico. En primer año usaba una barbita y se vanagloriaba de venir de la Universidad Santa María . Era un campeón para robarse las pruebas de la oficina de los profesores, gran organizador de mafias, Glad Consuerte, en mi vida he conocido un tipo más audaz y mas suertudo que ese. Si tuviera que ir a un lugar peligroso esa es la persona que me gustaría tener por acompañante. Con el chico nos hicimos amigos como a la mitad de la carrera y después que terminamos fuimos estrechando nuestra amistad, pasamos muchas aventuras juntos y es una de las personas que realmente me alegro cuando me llama por teléfono, amigo de primera y campeón para dar sablazos. El Alfredo es para mi la encarnación de la palabra pachorra, tenía el savour faire para manejarse incluso en los apuros más grandes. Espero que vuelva algún día a vivir a Arica para tener con quien tomar nuevamente.

Lucho Rucha es otro de mis grandes amigos. Aunque ha sido el primero en volverse viejo y dedicarse a la pesca y el cacho en su club de Toby, todavía salimos de vez en cuando a tomar un copete a la Isla del Alacrán. Como dijo certeramente otro amigo, el Lucho es de plasticina, dúctil, se amolda a cualquier circunstancia y también es un gran organizador. Pero el que yo recuerdo de la U cuando era el campeón del copete; su capacidad para tomar era prodigiosa y hubo varios certámenes memorables entre él y Macana para dirimir quien era el verdadero campeón. También era bueno para la pelota y recio para las patadas y los puñetazos, aunque su carácter, aún con trago es extremadamente pacífico. En la foto, durante una salida a la Isla en plena actividad etílica.

Otro gran amigo del primer año de la Universidad fue el Pato B., con quien nos sentábamos en la plaza a la hora de almuerzo, planchados, para olvidarnos del hambre pensando en cuantas plata tendría en el bolsillo cada transeúnte que pasaba y como podríamos hacer para transferir esa plata a nuestros propios bolsillos. Con Pato ideamos mil negocios y algunos hasta resultaron, como el instituto preuniversitario clandestino que usaba las instalaciones y el nombre de la Universidad, fue muy bueno hasta que pusimos publicidad en la radio y nos sorprendieron. Todavía recuerdo el eslogan:

"La educación es una llave que le abrirá muchas puertas. no confíe en la suerte...prepárese. Instituto Preuniversitario de la Universidad del Norte"

Cuando se supo que estábamos abusando del nombre casi nos cuesta la expulsión, pero almorzamos durante mucho tiempo gracias al falso Instituto y a las numerosas amigas del Pato. Con el tiempo el se cambió a Ingeniería Comercial y seguimos amigos hasta que se fue a sacar su magister al extranjero, hoy Don Patricio es un serio ejecutivo en Santiago que seguramente extraña de vez en cuando los combinados del "Cali" que nos tomábamos entre amigos en los tiempos de vacas flacas.

El Corcho y el Flaco Oyarce también fueron dos grandes amigos que egresaron unos años antes que yo. El caso del Corcho es muy extraño porque se trata de un tipo excepcionalmente dotado para las matemáticas, feísimo e insaciable para el trago y la parranda, lo que terminó por hundirlo. La asombrosa inteligencia del Corcho tenía su contrapartida en un desmesurado ego y la incapacidad de permanecer sobrio más de dos días seguidos. No he conocido en mi vida un amigo más generoso que él, a él le debo mi primer trabajo, innumerables almuerzos, onces, comidas y en su modesta casa pase varias pascuas y años nuevos cuando no tenía un peso en el bolsillo. Nunca le retribuí su generosidad pero creo que está bien así: los favores de los amigos son gratis y algún día tal vez me toque devolverle la mano. Con el Flaco Oyarce fuimos compañeros en mi primer trabajo durante los años de la ZOFRI y pasamos un tiempo inolvidable, luego se convirtió en traidor porque dejó el trago y las farras, desde entonces solo nos juntamos a conversar de vez en cuando.


Tiempos Aquellos

 Año ¿1984? de izquierda a derecha: media cara de Matute le pasa la botella de pisco a su socio Pato Bilingue, atrás un joven Macana es abrazado por su novia de entonces, la "ricas piernas" abajo estoy yo acostado confortablemente en el regazo de mi novia de entonces y hoy, Pilar. Fue durante la memorable inauguración del departamento, uno de los múltiples negocios de la empresa "Iglesias, Sanhueza Ltda."  


El primer finado

El Negro Morales fue el alumno más brillante que ha pasado por Ingeniería Civil Eléctrica, de donde egresó en tiempo record, sin embargo nunca dio el examen de grado, tenía una inteligencia prodigiosa y cuando estudiábamos conversábamos ingenuamente de nuestras ambiciones de lograr algo grande en nuestra profesión. Luego de egresar trabajó para corredores de la bolsa de comercio, ganando bastante plata. de esa época ya quedó alcohólico incurable: todos tomábamos en la U pero el negro se quedó pegado, después se fue a vivir a Santiago y cada vez que estaba borracho y se sentía solo agarraba el celular y me hablaba durante horas, mientras yo con mi avaricia lo urgía a que cortara. Cuando venía a Arica lo primero que hacía era pasar a buscarme, no recuerdo haberlo visto nunca sin que estuviera borracho. Finalmente llegó grave: cirrosis y desnutrición aguda, yo me negué a irlo a ver de puro supersticioso y después de unos pocos días se murió. Nos acordamos mucho del Negro, normalmente para hacer bromas. Nos reímos siempre a costillas de él y sus chascarros, mal que mal, era un tipo sumamente divertido y es el primer amigo que se nos muere. 


Otra foto histórica

Fue la última vez que nos juntamos con mis mejores amigos de la Universidad. Posando para la foto, que nos tomó Pilar, de izquierda a derecha aparezco yo (con polera sicodélica), Pato Bilingüe, Matute y Macana. Todos jóvenes, sin plata y buscando trabajo. La foto la tomamos en Tocopilla donde por casualidad coincidimos. No sospechábamos que sería la última vez que estaríamos todos juntos. Matute y el Pato se iban a sus casas de Santiago y Muerto Montt respectivamente, Macana iba a una entrevista de trabajo en Chuquicamata y yo iba a Santiago llevando unos Betamax de contrabando (Matute-Bilingüe Ltda. también llevaban los suyos), fue un día muy importante para mí y guardo esta foto con el recuerdo de una enorme amistad que sigue en pie a pesar de los años que no nos juntamos.


¿Y después de la Universidad?

Creo que no tengo distancia suficiente todavía para hablar de mis amigos actuales. Solo diré que les debo los mejores momentos y como prueba algunas fotos de estas felices ocasiones:

Año nuevo 2000

¡Adiós Maldito 2000!

Día de Campo en Azapa

Noche de sábado con mis amigos


¿Y las amigas?

Ya dije que no iba a hablar de ellas pero por lo menos voy a nombrar a algunas, no puedo dejar de hacerlo. Eso de que no existe amistad verdadera entre un hombre y una mujer es mentira, yo he tenido grandes Amigas, con mayúsculas, con quienes he compartido mucho más allá que con mis amigos hombres. Siento un enorme cariño y admiración por todas ellas y las pongo en orden alfabético para que no se vayan a enojar:

Amparo, Cindy, Erika, Fabiola, Fresia, Hortensia, Jimena, Marlene, Mariela, Maritza, Marcela, Rosa, Shenda y Yoly, hay otras que no las pongo por motivos que me reservo.  

 Y lo dejo hasta aquí por el momento. Los (las) que no haya mencionado y se sientan justamente ofendidos (ofendidas) pueden enviar reclamos, golpes insultos o escupos que aquí los espero, vayan pasando de a uno.