Los Problemas de Arica

 

Arica, lo mejor del mundo

Vivo en Arica desde 1974 y recuerdo bien el boom de las industrias armadoras de esa época , la depresión que vino luego con la baja de aranceles, el tremendo auge comercial a comienzos de la Zofri y nuestra actual depresión que ya va para los diez años.

Todos mis amigos están acá, en esta ciudad compré mi casa y pretendo -Dios mediante- seguir invirtiendo aca todo lo que gane. Quisiera seguir en Arica hasta que me muera porque creo que es uno de los mejores lugares del mundo, que conozco, para vivir.

Cuando Schumacher escribió "Lo pequeño es hermoso" seguramente pensaba en ciudades como esta, con 170.000 habitantes y limitada naturalmente por estar en medio del desierto mas seco del planeta. Nuestra ciudad, de pocos edificios, esta en su totalidad construida "a escala humana", ni tan chica que asfixie, ni tan grande que se ahogue en su propia basura.

Curiosamente somos la única ciudad cosmopolita de Chile. Estamos acostumbrados a vivir al lado de culturas diferentes, aceptar puntos de vista diferentes, lo que nos salva del provincialismo mental del resto de nuestros compatriotas, que piensan que la única manera correcta de hacer las cosas es la propia. Es característica la exasperación de la gente del sur del país cuando debe vivir en un medio que violenta sus propios prejuicios.

Los problemas de Arica: la explicación estándar

Uno de los temas recurrentes de los que vivimos acá y nos gusta nuestra ciudad es la larga crisis económica, cada cual tiene sus propias explicaciones y recetas así es que yo paso enseguida a exponer la mia.

Mirando la historia, Arica es una ciudad que ha oscilado entre períodos de gran prosperidad alternados con largas depresiones, lo que ha llevado a una de las explicaciones más comunes y repetidas sobre nuestros problemas: seríamos una ciudad que ha vivido de subsidios y solo eso explica las épocas buenas, Nunca ha existido un desarrollo productivo real, que permita un bienestar sostenido en el tiempo.

Esta explicacion tiene la ventaja de la simplicidad, hasta los mas tontos pueden entenderla como ocurre frecuentemente con los esquemas, el problema es que no tiene nada que ver con la realidad. Parte de una premisa falsa como es la visión paternalista según la cual es la capital la que concede graciosamente recursos a las provincias, cuando la verdad es que ocurre todo lo contrario.

Desarrollo "a la Ciudad de Mexico"

Chile es un pais unitario cuyas mayores riquezas naturales están en la minería de las dos primeras regiones. Somos principalmente exportadores de minerales, el cobre sigue siendo "la viga maestra de nuestra economía" tal como en los años sesenta. La riqueza de Chile está concentrada en el norte y de no haber sido por la guerra del Pacifico hoy seríamos seguramente un país pequeño y mucho mas pobre de lo que somos.

Pero como país unitario, toda la plata se va para la capital, que crece desmesuradamente y, a estas alturas, concentra en un pequeño territorio a más de seis millones de personas, en hacinamiento, suciedad, polución, delincuencia y lumpen. Al concentrarse tanta gente en la capital, esta se convierte en un punto hambriento de recursos, gran parte del ingreso se gasta allí porque, además es la fuerza electoral más grande de Chile y los que deciden los gastos no son, ni mucho menos, indiferentes al problema de la administración del poder.

Si hay un problema importante en Chile hoy, es el del crecimiento desproporcionado de la Región Metropolitana que nos impedirá siempre el desarrollo tal como ocurre con Ciudad de Mexico o Calcuta: es imposible desarrollarnos como pais con más de la mitad de la población concentrados en menos del 3% del territorio. La Región Metropolitana es el lugar más subsidiado de Chile

Nuestras potencialidades

Teniendo claro que es la hipetrofia de la capítal la que limita nuestras posibilidades de crecimiento y bienestar, pasemos a ver el caso de Arica. Uno de los errores más comunes ante el desarrollo de Arica es pensar que la única manera de tener desarrollo es a través de la industria o la agricultura..

Ese es un concepto anticuado, desmentido por miles de "empresas de garage" que han hecho fortuna sin producir nada físico (empresas como Patagon.com y todo el comercio electrónico), existe también el desarrollo turístico que ha traido prosperidad duradera a tantas ciudades del mundo ¿por que no a nosotros? y desde luego existe la ventaja natural de la que ha vivido Arica desde siempre: el comercio internacional.

Muchos remedios, poca efectividad

Muchas han sido las recetas aplicadas en épocas de crisis para convertir a Arica en una ciudad próspera: algunas se han fundado en el fomento a actividades productivas tradicionales (parques industriales) y solo tuvieron éxito en la época del desarrollo hacia adentro bajo la política de sustitución de importaciones, es increíble que todavía hoy el gobierno siga alentando esas utopías, en un Chile de economía abierta y globalizada donde la división mundial del trabajo ha dejado a la manufactura en manos de robots o mano de obra oriental, contra la cual sería ilusorio competir. Los Parques Industriales de Chacalluta y Puerta de América son monumentos al desatino del gobierno, jamás debieron crearse esa clase de espectativas y aquí la responsabilidad es clarísima.

Otra ilusión es fomentar el desarrollo agrícola en el desierto mas seco del mundo. El proyecto agrícola de "Las 1.500 hectáreas" de Chacalluta muestra la irresponsabilidad y hasta locura de sus impulsores. Están simplemente ofreciendo un engaño, y no tengo duda que resultarán burlados. El particular que se adjudique el proyecto, apenas agote el cobro de todas las bonificaciones e incentivos que pueda, se irá sin duda, dejando botado el pedazo de desierto que le pretendieron vender.


Nuestras verdaderas ventajas naturales

Hay dos actividades que históricamente han mantenido a Arica tanto en épocas buenas como en las malas: son el turismo y el comercio con los países vecinos. Pase lo que pase estas dos actividades no mueren porque están basadas en ventajas naturales, reales de la ciudad.

En cuanto al turismo Arica es el balneario natural de La Paz, Bolivia, que está a menos de 8 horas de camino por una excelente carretera pavimentada que recorre los paisajes únicos del altiplano. Siempre han venido bolivianos a veranear a nuestra ciudad a pesar que nuestra infraestructura turística es mísera, que la ciudad prácticamente no tiene buena cocina ni vida nocturna y, como decia Cervantes, parece ser el lugar "donde toda incomodidad tiene su asiento".

Por otra parte estamos en la encrucijada de los destinos turísticos más interesantes para los países desarrollados: Cusco, Macchu Picchu, Tiawanacu, Lago Chungará y San Pedro de Atacama. Desde antiguo nuestra ciudad recibe durante todo el año un flujo constante de gente de USA, Europa y Oceanía. Es de elemental lógica corregir de inmediato todas nuestras deficiencias e invertir fuertemente en el desarrollo de infraestructura turística así como promover el surgimiento de vida nocturna y actividad gastronómica en la ciudad.

En cuanto al comercio, para que hablar. La frontera con Tacna a escasos kilómetros así como nuestra vecindad con Bolivia son una puerta abierta lógica para esos dos mercados, siempre ha existido un activo comercio de Arica hacia ambos países, no es algo que haya que inventar, es nuestra ventaja natural y obvia. Arica tiene una enorme infraestructura comercial subutilizada, tanto en ferias, centros comerciales como una vasta zona de bodegas, la mayoría abandonadas o sub utilizadas, desde la época del auge de las armadurías.


¿Y como financiar?

Las ventajas de la ciudad siempre han estado claras, solo falta la decisión y la inteligencia para que estas ventajas se desarrollen en todo su potencial. Si seguimos con el actual esquema de subsidios y bonificaciones jamás obtendremos nada y nuestra ciudad seguirá siendo para siempre un lugar delicioso para vivir y completamente improductivo, una carga para el país, y todos sabemos que "el país" en nuestro caso es lo mismo que el gobierno central y no esta para nada dispuesto a llevar cargas. Así estaríamos condenados a la depresión eterna.

La solución para Arica es, a mi modo de ver, simple y no le costaría un solo peso al fisco. Pimero se eliminan todos los subsidios y bonificaciones, luego se da una moratoria absoluta de impuestos, por diez años para todas las
nuevas inversiones en turismo y comercio. El fisco no perdería absolutamente nada puesto que estas nuevas inversiones no existirían sin la moratoria, se potenciarían las actividades claves para la ciudad, se generaría riqueza que, pasados los diez años resultarían en un gran retorno para las arcas fiscales. Arica pasaría a tener impulso propio. Más aún, si la Zofri demostró ser tan buen negocio para el fisco (mientras duró) ¿por que no hacer de la ciudad de Arica una zona franca para productos nacionales? ¿que mejor manera de activar la producción nacional, las exportaciones y el nivel de vida de los habitantes de la provincia?